Dónde se trabaja es tan importante como lo que se hace. El diseño de las oficinas ha evolucionado mucho desde principios del siglo XX y sigue cambiando año tras año. ¿Qué hace que una oficina sea productiva? Hay muchos detalles, grandes y pequeños, que pueden contribuir a la productividad en la oficina o crear un entorno que distraiga. Desde la iluminación hasta la distribución de los escritorios, pasando por el color de las paredes, el entorno en el que te encuentras es importante para tu éxito en el trabajo.
Los diseños de oficinas abiertas han ganado popularidad en los últimos tiempos. Se cree que el diseño abierto permite a los usuarios colaborar más. También se cree que los espacios abiertos evitan que los empleados holgazaneen debido a la responsabilidad visual a la que están sometidos. Sin embargo, algunos consideran que las oficinas abiertas distraen y son caóticas. Hay muchas empresas que se aferran a los cubículos o a las oficinas de puertas cerradas, y ese método les funciona. Aunque está demostrado que el diseño de la oficina influye en la productividad de los empleados, el diseño del espacio en sí no es tan importante como los detalles que lo componen. Hay ciertos aspectos del entorno de oficina a los que los altos cargos deberían prestar atención si quieren mejorar la productividad.
Los empleados pasan entre 8 y 10 horas al día en su entorno de oficina, por lo que es crucial que la oficina esté adecuadamente iluminada. Trabajar en una zona bien iluminada reduce la fatiga visual, los dolores de cabeza, el cansancio y la irritabilidad. En un estudio recientese ha demostrado que la productividad aumenta hasta 16% cuando los empleados se encuentran en un espacio de trabajo bien iluminado.
Al igual que la iluminación, la ventilación es otro detalle crucial a tener en cuenta a la hora de diseñar un espacio de trabajo productivo. OSHA estima que los empresarios pierden anualmente un total de $15.000 millones "debido a la ineficacia de los trabajadores y a las bajas por enfermedad" que se asocian a la baja calidad del aire. Instalar filtros de aire e incorporar aire fresco mejorará la productividad, reducirá las bajas laborales y ahorrará dinero a la empresa a largo plazo.
El color es una parte importante del diseño de una oficina, y elegir los colores adecuados puede afectar a los niveles de productividad. Está demostrado que el azul aumenta la productividad. El naranja es otro color que fomenta la energía, por lo que se utiliza a menudo en las paredes de las oficinas. Si el azul y el naranja no son los colores que prefiere, un estudio de la Universidad de Massachusetts demuestra que incorporar cualquier color al diseño de una oficina fomenta la creatividad y mejora el estado de ánimo.
Por supuesto, es importante que los escritorios y las sillas de su oficina tengan un aspecto agradable y profesional. Sin embargo, es más importante que los espacios de escritorio de sus empleados se adapten correctamente a sus cuerpos.
Es un error común creer que una oficina más fría es un entorno más productivo. La mayoría de las oficinas se mantienen a unos 66 grados por este motivo. En realidad, una oficina más cálida puede aumentar la productividad. Un estudio de Cornell relacionó "las oficinas cálidas con menos errores de mecanografía y mayor productividad". El estudio también determinó que la temperatura ideal de una oficina oscila entre los 68 y los 77 grados Fahrenheit.
Estos cinco detalles de diseño son un buen punto de partida para quienes desean que su oficina sea más productiva. Independientemente de dónde trabajes, ten en cuenta la iluminación, la calidad del aire, la zona de tu escritorio y cómo te sientes físicamente. Si estás pasando por una fase en la que eres menos productivo de lo normal, un ligero cambio puede ayudarte.
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